28 abril 2007

Top Secret

¿cuánto gana usted?

Así como en la aparición de Zapatero en TVE la polémica la suscitó su evidente desconocimiento de lo que valía un café en la calle, en la de Rajoy vino de sus reservas a la hora de decir lo que gana.

En el norte de Europa no está mal visto decir lo que uno gana. De hecho, es bien conocido el dicho “tanto ganas, tanto vales”. Sin embargo, en los países mediterráneos, muchas veces es un secreto muy bien guardado que da lugar a mucha casuística.

Aquí, normalmente, el que gana mucho no lo dice (seguramente porque no quiere que le pidan). Luego están los que ganan poco pero, para alimentar su ego, intentan aparentar lo contrario lo cual hoy es posible gracias a nuestro avanzado sistema financiero (tarjetas, préstamos, hipotecas, etc.). Por último están los que siempre dicen ser pobres (de estos los hay que realmente lo son y los hay que tienen de sobra pero les gusta el coleccionismo de dinero, cuentas bancarias, acciones, etc).

Si nos remitimos a las estadísticas, el salario bruto anual asciende a 23.000 euros, pero según las tablas de los sindicatos el 62% de los asalariados españoles cobran menos de 17.000 euros brutos al año. Al margen de estudios oficiales, hemos leído en la prensa noticias como la proliferación de los llamados “mileuristas”, lo cual nos hace pensar en personas que a duras penas llegan a los 1.000 euros al mes, incluidas pagas, vacaciones, etc; normalmente con contratos basura (no indefinidos). Y lo más alarmante es que todavía hay quien se daría con un canto en los dientes si pudiera alcanzar los 4 dígitos en el importe de su nómina mensual.

Si una vivienda de 80 metros cuadrados (que no es mucho pedir) está costando 300.000 euros. Si los billetes de avión se venden 2 meses antes de que empiece el verano. Si las plazas hoteleras están al completo cada vez que llega un puente. Si las calles están llenas de coches, muchos de ellos de importe cercano a los 25.000 euros. Y, aceptando la mejor estadística de salarios, ganamos 23.000 euros al año. ¿De dónde sale el dinero?. Las cuentas no salen. Por eso es mejor no decir nunca lo que se gana y seguir aparentándolo, que es lo que mejor sabemos hacer en España.


21 abril 2007

Telefónica nos Molesta

y no pasa nada

Imaginad que un conocido os va a enviar un SMS al móvil y por equivocación, al acceder a su agenda, selecciona vuestro teléfono fijo enviándolo a vuestra casa.

En la mayoría de los casos, esto se traduce en una gran putada. Al parecer, la mayoría de los teléfonos fijos no están preparados para recibir SMS por lo que Telefónica emitirá varias llamadas a vuestro domicilio intentando que el mensaje de texto sea recibido. Por si no tenemos suficiente con los pesaditos del "número privado" que llaman cada dos por tres para vendernos ADSL, TV por cable, tarjetas, seguros, etc..., aquí tenemos más.

Las llamadas son recibidas a cualquier hora del día y son muchos los usuarios que se han quejado por recibirlas repetidamente a lo largo de la noche. El número emisor es el 900716801, el centro automático de envío y recepción de mensajes de Telefónica de España, S.A.

La solución pasa por contratar con Telefónica alguno de sus servicios, los cuales tienen cuota de alta de 6 euros y cuotas mensuales de 1 euro. Por ejemplo, tenemos el servicio llamado "Rechazo Selectivo de Llamadas". Con ese servicio puedes bloquear llamadas entrantes tecleando *93#N, donde N sería el número a bloquear. También está el servicio "No Molesten" que al activarlo desvía las llamadas al contestador.

En principio, lo del 900 éste que te incordia podría interpretarse como una sucia artimaña de Telefónica para que los usuarios se vean obligados a contratar servicios adicionales. Si así fuera, conmigo van listos porque yo prefiero desconectar el teléfono por la noche.

A mí, en principio, me cuesta pensar que una compañía grande como Telefónica recurra a estos trucos para vender sus servicios y no creo en la mala fe. Pero lo que sí es denunciable es ese sistema mediante el cual ese teléfono 900 que gestiona los envíos de SMS molesta al usuario a cualquier hora del día. Que lo quiten.

20 abril 2007

Rajoy, algo mejor

pero demasiado político

Rajoy ganó a Zapatero en audiencia y en las encuestas de internet la gente opina que estuvo mejor (El País). No era difícil estar mejor que el tostón ZP que aburre a las ovejas. Al margen de ideologías, hay un dato objetivo que demuestra que el líder de la oposición es más ameno: Rajoy contestó más de 70 preguntas y Zapatero apenas superó las 40.

Sin embargo, aunque Rajoy estuvo mejor, no fue el político que queremos los españoles. Volvimos a escuchar discursos llenos de demagogia. No tanta como la que escupe Zapatero, pero bastante. Conviene concienciar a los ciudadanos de que lo que ellos quieren (que normalmente es que les den médicos, casas, ayudas y, sobre todo, dinero) no sale de la nada y es porque otros ciudadanos lo pagan. Si a unos les promete más pensiones y a la vez está anunciando más bajadas de impuestos ¿de dónde va a salir el dinero?

Por otro lado, echamos de menos políticos que se mojen. Rajoy, dentro de su corrección, cayó en más de una ocasión en el discurso políticamente correcto y es que en política parece que hay que intentar contentar a todos, cosa que lleva necesariamente a ambigüedades.

Hubo contestaciones que sí me gustaron. Por ejemplo, la de los inmigrantes: “la inmigración me gusta pero no cabemos todos”. Claro que habría que mirar atrás y recordar que la política del PP en materia de inmigración no es un buen ejemplo propiciando el inicio del problema.

Hubo también contestaciones que no me gustaron: “gano bastante más que usted” le dijo a una señora (a mi parecer bastante indiscreta, esos sí) que le preguntó su sueldo. Habría sido preferibleque le contestara al menos parte de la verdad: “sólo como diputado gano 3.861 euros mensuales”; es una de las cosas que ningún político dirá porque se les tenía que caer la cara de vergüenza, sobre todo a los que luego no acuden con regularidad a su escaño que son bastantes.

Finalmente, agradecer a Rajoy que se dirigiera a los ciudadanos con trato de usted.


11 abril 2007

¿Democracia?

¿para qué?

Mucho se ha hablado siempre de lo importante que es para los ciudadanos de un país tener una democracia o, lo que es lo mismo, de los inconvenientes de las dictaduras cuyo denominador común es la represión y, con ella, la falta de libertad.

Pero quienes tenemos que vivir de una nómina nos preguntamos de qué vale la democracia si tenemos que pasar 8 horas diarias (o más) en nuestros respectivos trabajos, metidos en un lugar donde existen los tratos de favor, la discriminación, las represalias, la falta de transparencia y una total ausencia de libertad. En casos más extremos tenemos que hablar del mobbing, un fenómeno tan denunciable como difícilmente demostrable, por desgracia.

El resto del día lo pasamos desplazándonos o perdiendo el tiempo en horarios partidos, durmiendo (se recomiendan 8 horas) y, finalmente, las 5 o 6 horas restantes, disfrutando de la democracia que tan felices nos hace por ser el sistema menos malo.


08 abril 2007

Vamos a peor...

...y nos dicen lo contrario

Según un informe de la Cámara de Comercio de Madrid, la compra de viviendas en Madrid baja a niveles de 1994. Es un indicio de agotamiento de un mercado que parece haber tocado techo tras una subida espectacular iniciada desde que entró el euro. ¿Es para estar contentos?...

El informe se basa en una encuesta de consumo según la cual los madrileños destinamos nuestro dinero a bienes de bajo coste (ropa, hostelería, ocio, etc) para centrarnos menos en los bienes que suponen un gran desembolso.

Según esta tendencia queda claro que nuestro modo de vida ha cambiado mucho desde aquellos tiempos lejanos (30 años o más) en los que lo normal era la familia con dos o más hijos, sólo el padre trabajaba y su sueldo era suficiente para comprar una vivienda digna y pasar un mes seguido de vacaciones repartido entre el pueblo y la playa.

Ahora todo ha cambiado. La mujer que no trabaja es una especie en peligro de extinción, dos sueldos se quedan cortos y muchas familias deciden que con un hijo es suficiente. Las vacaciones hay que repartirlas a lo largo del año porque 11 meses seguidos trabajando no los aguantaría nadie. Además, como muestra la encuesta, nos hemos vuelto consumistas y el poco tiempo que tenemos de ocio lo queremos aprovechar al máximo. Lo peor es que, con todo, hoy somos menos felices.

Mientras, el gobierno se querrá apuntar el tanto de que la vivienda ha bajado gracias a ello y tirarán de las malditas estadísticas (de las que el presidente abusó en su última aparición en TV), intentando meterse en el bolsillo a los ignorantes, a los que no saben que los precios los fija el mercado y no el gobierno, a los que no han caído en la cuenta de que la subida de los tipos de interés hace que el precio de las casas disminuya (al tratarse de bienes de inversión) pero eso no es real porque el esfuerzo que tenemos que hacer para comprar una vivienda cada vez es mayor.