Hacienda falla

al enemigo, ni agua

Hacienda lleva desde finales de marzo enviando borradores de declaraciones de renta y raro es el borrador que está bien. Amigos y familiares me llaman pidiendo ayuda. Acuden a mí porque sé un poco del tema fiscal. El caso es que desde hace un par de meses no hago otra cosa que rectificar borradores por Internet.

Hay un denominador común en los errores: el perjudicado siempre es el contribuyente. Por poner algunos ejemplos: omisión de cuotas a sindicatos pese ha haberlas comunicado previamente con los modelos 104 y 105, inclusión del abono anticipado de la deducción por maternidad como mayor cuota a pagar y, sobre todo, la desaparición de la deducción por adquisición de vivienda habitual a pesar de que en la hoja de datos fiscales expedida por la AEAT o en el borrador del año pasado sí aparecen los pagos de hipoteca.

Menos mal que la Agencia Tributaria tiene bastantes medios para corregir estos borradores y, entre ellos, el de Internet que es el más recomendable para evitar aglomeraciones.

Sin embargo, me ha llamado poderosamente la atención otro detalle: uno de los borradores que tuve que rectificar estaba bien (¡increíble!) pero el contribuyente desea marcar la opción de la “asignación a la Iglesia Católica” como ha hecho siempre, año tras año. Alguien ha decidido por él y le ha cambiado la cruz. En esta ocasión su borrador viene con la otra casilla marcada por defecto (la de “fines sociales”). Pero aquí no acaba el problema porque me he metido en Internet y este dato no lo he podido rectificar. Está claro que el gobierno de Zapatero considera a la Iglesia el enemigo y hacen bueno aquello de “al enemigo, ni agua”.